Las Hijas son Especiales
El
primer día de casados marido y mujer pactaron no abrir la puerta a ninguna
visita.
El
mismo día los padres del marido aparecieron para visitarlos.
Golpearon la
puerta, el marido y su mujer se miraron, el marido quiso abrir la puerta pero
no lo hizo por causa del pacto, entonces sus padres se fueron.
Un poco después, más tarde, los padres de la mujer llamaron a
la puerta. Nuevamente marido y mujer volvieron a mirarse. Sin embargo, la mujer entre
lágrimas afirmó "yo no puedo hacerle
esto a mis padres" y abrió la puerta.
El marido la miró pero no dijo nada.
Pasaron los años y la pareja era feliz, tuvieron dos hijos
varones y al cabo de un tiempo llegó su tercer hijo, en esta ocasión Dios les
regaló una niña.
A la llegada de la hija, el padre se encontraba muy
entusiasmado e hizo una gran fiesta para conmemorar el nacimiento de la pequeña,
invitando a toda la gente de ambas familias.
Desconcertada, la esposa quiso saber el motivo de celebrar
con una gran fiesta el nacimiento de la hija, mientras que con los varones no
había sido así.
El marido entonces simplemente le respondió:
"Por fin llegó
la única persona que algún día me abrirá la puerta"
..................................................................................................................
El padre le pregunta a su hija:
Hija ¿El amor que sientes hacia mí es más grande que el que
sientes por tu marido?
Ella respondió:
Papá, realmente no lo sé, pero cuando te miro y te siento cerca me
siento tan protegida que me olvido de mi marido. Y cuando miro a mi marido, al
sentir su cariño y verlo cuidar de nuestros hijos, solo me acuerdo de ti.
Las hijas son tan especiales, porque a pesar de que crezcan,
su corazón nunca olvidará su origen y responderá a él con eterna gratitud.
Hijas, siéntanse bendecidas por ser los seres especiales que
Dios escogió para dar cumplimiento eficaz a su cuarto mandamiento. Padres, confíen
en el eterno amor que le tendrán sus hijas, porque cuando parezca que todos se
están yendo, una hija siempre estará presente.
Espero les haya gustado estas historias y hayan disfrutado de su lectura, tanto como yo.
No se olviden de compartir con las personas de las que se acordaron, con sus seres especiales o quienes crean les puede gustar o llegar en un oportuno momento.
Sean felices y tengan sentimientos positivos.