EL VIEJO
PERRO CAZADOR
Hace muchos años, vivía
un viejo perro de caza, cuya avanzada edad le había hecho perder gran parte de
las facultades que lo adornaban en su juventud. Un día, mientras se encontraba
en una jornada de caza junto a su amo, se topó con un hermoso jabalí, al que
quiso atrapar para su dueño. Poniendo en ello todo su empeño, consiguió
morderle una oreja, pero como su boca ya no era la de siempre, el animal
consiguió escaparse.
Al escuchar el escándalo, su amo corrió hacia
el lugar, encontrando únicamente al viejo perro. Enfadado porque hubiera dejado
escapar a la pieza, comenzó a regañarle muy duramente.
El pobre perro, que no se sintió merecedor de
semejante regañina, le dijo:
-Querido amo mío, no creas que he dejado
escapar a ese hermoso animal por mi gusto, pues mi espíritu es tan bueno como
siempre. He intentado retener al animal al igual que hacía cuando era joven,
pero por mucho que lo deseemos ambos, mis facultades no volverán a ser las
mismas, no he podido sobreponerme a mis flaquezas del cuerpo, por eso te pido
un favor:
En lugar de enfadarte conmigo porque me he
hecho viejo, alégrate al recordar todos esos años en los que yo te ayudaba sin
descanso, así yo podré recibir una alabanza por lo que he sido y no un maltrato
por lo que ahora, ajeno a mi voluntad, soy.
RECUERDA: Respeta
siempre a las personas mayores, pues tienen el valor de la experiencia y aunque
ya no puedan realizar grandes proezas tal vez físicas, son una fuente
inagotable de sabiduría y amor.
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